La reaparición de Taboada… ¡en Hidalgo!

Santiago Taboada terminó por dejar en el camino más de 2 millones 160 mil votos que obtuvo en la elección pasada como candidato a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México. Reapareció este jueves haciendo proselitismo en público, pero no para él, sino para su jefe político, Jorge Romero, candidato a la presidencia nacional del PAN.
Santiago Taboada terminó por dejar en el camino más de 2 millones 160 mil votos que obtuvo en la elección pasada como candidato a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México. Reapareció este jueves haciendo proselitismo en público, pero no para él, sino para su jefe político, Jorge Romero, candidato a la presidencia nacional del PAN.

Mensaje Político


Alejandro Lelo de Larrea


Santiago Taboada terminó por dejar en el camino más de 2 millones 160 mil votos que obtuvo en la elección pasada como candidato a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México. Reapareció este jueves haciendo proselitismo en público, pero no para él, sino para su jefe político, Jorge Romero, candidato a la presidencia nacional del PAN.

Después de los comicios del 2 de junio Taboada se fue de viaje, se guardó un rato y se le vio muy poco en eventos públicos, apenas como invitado, con muy bajo perfil e incluso tratando de eludir entrevistas con medios de comunicación, apenas para ir perfilando que se dedicaría a política nacional. Este jueves, ya lo hizo abiertamente, dijo adiós a sus electores de la CDMX y se lanzó a recorrer el país.

Pero, aunque lo mencionan como Santiago Taboada, dejó de ser Santiago Taboada: va “con la representación de Jorge Romero”. Se reunió con militantes y ofreció una conferencia de prensa en Pachuca, Hidalgo. No expuso su perspectiva, como cuando fue candidato a la Jefatura de Gobierno, ahora habló de la visión de quien se encamina a convertirse en presidente nacional del blanquiazul.

Son tres ideas fuerza que expuso Taboada y llevará en sus recorridos por todo el país en su campaña a favor de Romero. Primero: unir al PAN en su militancia y con la ciudadanía, que sienta que los representa; segundo: renovar al partido, acercarlo a los jóvenes, y tercero: que los candidatos a cargos de elección popular sean quienes trabajan en las calles, en el territorio. Es el mensaje político de Taboada, a nombre de Jorge Romero, de quien todo apunta será su secretario de elecciones en el Comité Ejecutivo Nacional (CEN).

A partir del resultado de la campaña de Taboada en la CDMX, si se hace trata de proyectar la labora que hará en la cartera que ocupará en el CEN, lo más probable es que obtenga buenos resultados. En el pasado proceso electoral logró hacer muchas alianzas, que gente rompiera con Morena, que los enojados con el sistema lo apoyaran, empresarios insatisfechos con el gobierno; pactó con el PRI y el PRD. Quedó a 12% de distancia de Clara Brugada. Sumó 2 millones 160 mil votos, el mejor resultado para un panista en la Ciudad de México, desde que hay elecciones en 1997.

Precisamente por ello es que todo mundo se sorprendió de que Taboada no se quedara en la CDMX a hacer política; mucha gente que se la jugó con él, que dejó su partido, su zona de confort, ahora padece el abandono de su líder, que los dejó a su suerte.

Taboada también se ha ido distanciando de sus aliados dentro del mismo PAN de la Ciudad de México, y va soltando los hilos del poder que tenía. De aquí a diciembre, tiene el mando del PAN capitalino, con Patricia Báez, quien es de su grupo político. Pero en ese mes asumirá Luisa Gutiérrez el cargo –todo apunta así–, y Taboada tendrá una posición menos.

Gutiérrez es del grupo de Christian Von Roehrich, preso en el Reclusorio Norte desde hace casi dos años, y uno de los “quintos”, como se hacen llamar los cinco panistas del primer círculo de Romero. Y como en política no hay espacio vacío, lo que Taboada deje lo irán ocupando Mauricio Tabe, Andrés Atayde, Luis Mendoza y Luisa Gutiérrez, pues al ascender a la dirigencia del PAN capitalino de facto ella va a sustituir a Von Roehrich en el grupo de los “quintos”. Lo veremos.